A las fiestas de San Juan las
define el ritual de pasión en torno al toro, que mojona los diferentes días del
calendario sanjuanero (Desencajonamiento, Lavalenguas, La Compra , (Miércoles “El Pregón”),
Jueves “La Saca ”,
Viernes “de Toros”, Sábado “Agés” y Domingo “de Calderas”, los que culminan en
la romería del Lunes “Las Bailas” junto al Duero. En sí, este calendario
sanjuanero resulta de las relevantes mutaciones sufridas en sus “usos”. Porque
son los “usos” los que hacen la norma o “costumbre” y no al revés. Cual pasa
con la lengua: no se habla hoy idéntico castellano al del siglo XVII, y, sin
embargo, si este sigue vigente es porque ha sabido adaptarse al ritmo de los
tiempos para cumplir su cometido comunicativo. También los Sanjuanes son
comunicación y participación. En aras a organizarlos la ciudad se divide en las
hoy 12 cuadrillas, con sus Jurados al frente (posesionados en “El Catapán”). Hay
un procedimiento para su elección, si bien suelen presentarse voluntarios. Esto
es lo que hicieron dos vecinas amigas ofreciéndose ilusionadas para asumir el
cargo en la Cuadrilla
de Santa Catalina. (Sabida es la falta de postulantes). Y contaron con el
dictamen unánime de la
Comisión de Festejos del Ayuntamiento de Soria.
Tan pronto como trascendió la
noticia la reacción no se hizo de esperar. Se trataba de dos mujeres y eso (debido
a prejuicios propios de la educación machista recibida) no era de recibo. (Hubo
opiniones más radicales y brutales). Algunos -acaso poseedores de un sensor
democrático- exhibían la mayoría en contra. Para los guardianes de esencias o
“usos y costumbres” se pervertía algo tan sagrado para cualquier soriano que se
precie de serlo como son sus Fiestas de San Juan. Y quienes se amparaban en el art.
4 de las ordenanzas aprobadas en 2002, por encima de la propia Constitución y
de Leyes posteriores de Igualdad y de no discriminación por razones de sexo,
tanto españolas como europeas. El cometido de los Jurados es “servir la fiesta
a sus vecinos”. No son alcaldes de barrio, ni sumos sacerdotes (por cierto que
las mujeres ya podrán ser ordenadas obispas en Inglaterra). Para Jurado, pues,
“sirve quien sirve” frente a quien se sirve. Como dijo el poeta: “Habrá
palabras nuevas para la nueva historia / y es preciso encontrarlas antes de que
sea tarde”.
José María Martínez Laseca
(21 de enero de 2016)
No hay comentarios :
Publicar un comentario